miércoles, 28 de julio de 2010

La razón

Hay momentos en que corro desesperada tras recuerdos vagos y a la vez vívidos. Me encuentro colgada sobre los muebles viejos y envuelta en los olores más retrógrados de mi existencia.
Recorro los pasillos, oigo las voces, siento el calor o el frio del ambiente, colándome por los sentimientos densos y acomplejados, esos que se enredan tímidos y confusos en los espacios blancos que dejó mi memoria.
Me hago niña, regreso a mis raíces. Me chupo el dedo y dibujo alocadamente. Mi mente se infantiliza y lloro caprichosamente. No me quitaron la muñeca, ni el dulce… me quitaron lo que me sostenía y a la vez me independizaba. Me quitaron lo indescriptible, lo irreductible… y regreso… regreso… hasta saber, desde lo más profundo de mi ser, que nadie “me quitó”, ellos simplemente se fueron… ¿por qué? Porque sí.....

Pero ¿por qué "porque sí"?

No hay comentarios: